Una explosión en una instalación militar situada en Cheliabinsk, cerca de la frontera con Kazajistán, ha provocado la muerte de al menos nueve personas, confirmaron las autoridades rusas. Aún no se han esclarecido las causas del siniestro.
El gobernador de la región, Alexei Teksler, comunicó a través de su cuenta de Telegram que “se han confirmado nueve muertos”. “Hay cinco heridos. Nuestros equipos médicos hacen todo lo posible para estabilizar su estado. Estamos actualizando información sobre desaparecidos”, indicó, lo que sugiere que el número de víctimas podría incrementarse.
Además, Teksler destacó que el fuego desencadenado por la explosión “ha sido extinguido”, y señaló que “los equipos de rescate empezarán inmediatamente a retirar los escombros”. Concluyó asegurando que “Las familias y amigos de los fallecidos y heridos recibirán ayuda y apoyo, incluido apoyo psicológico”.
