Este domingo, dos ciudadanos ucranianos han fallecido y once más han sufrido lesiones a causa de un bombardeo ejecutado por las fuerzas militares rusas sobre áreas residenciales en la capital de Ucrania, Kiev.
«En el distrito de Svyatoshyn (Kiev), según información preliminar, murieron dos personas: una mujer joven y un niño menor de un año», ha informado el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko.
La ofensiva nocturna incluyó el uso de drones rusos que atacaron diversos edificios residenciales, ocasionando incendios y la caída de escombros. Estos eventos dejaron un saldo de dos muertos y once heridos, incluyendo una mujer embarazada, de los cuales cinco requirieron hospitalización.
A últimas horas del sábado, Klitschko alertó a los ciudadanos sobre el peligro de nuevos ataques. «Activada otra vez la defensa antiaérea de la capital. ¡Permanezcan en los refugios!», indicó.
Equipos de bomberos y rescate se encuentran trabajando en el lugar para socorrer a los damnificados y controlar los incendios surgidos también en varios vehículos.
Por otro lado, Alexander Gusev, gobernador de la región rusa de Voronezh, confirmó ataques por parte de Ucrania en su zona, que dejaron a un hombre herido debido a restos de un dron. Según sus reportes, se interceptaron seis drones en total.
Este reciente ataque a Kiev ocurre tras un incidente donde al menos 15 personas resultaron heridas en Zaporiyia, debido a drones rusos, el sábado por la noche.