La reciente jornada de manifestaciones en Francia, que tuvo lugar bajo el lema ‘Bloqueemos Todo’, finalizó con la detención de al menos 675 personas el pasado miércoles. Estas protestas se organizaron como respuesta a las medidas de austeridad impulsadas por el gobierno de François Bayrou, quien ya había presentado su dimisión.
Según informaciones del Ministerio del Interior, para el jueves por la mañana se contabilizaron 549 personas imputadas por los disturbios ocurridos el día anterior, con 164 detenciones solo en París y su área metropolitana, de acuerdo con datos recogidos por medios como ‘Le Figaro’ y BFM TV.
Además de los arrestos, la movilización provocó el bloqueo de algunas carreteras, sistemas de transporte y centros educativos. En París, los enfrentamientos esporádicos incluyeron el incendio de un restaurante. El ejecutivo confirmó que 34 agentes de seguridad sufrieron heridas, todas leves.
Bruno Retailleau, ministro del Interior en funciones, había advertido sobre la intolerancia del gobierno hacia cualquier acto de violencia, desplegando para ello un operativo de seguridad que alcanzó los 80.000 agentes entre policías y gendarmes.