La madrugada de este miércoles, aviones de combate de Israel han llevado a cabo operaciones en diferentes ubicaciones de la provincia de Sueida, en el sur de Siria, y en instalaciones pertenecientes al Ministerio de Defensa sirio en Daraa, de acuerdo con lo reportado por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Este organismo, que opera desde Londres y cuenta con colaboradores en Siria, ha publicado en su perfil de la red social X que se han efectuado ataques aéreos israelíes contra posiciones en Sueida y las afueras del aeropuerto de Al Thaala y un emplazamiento militar en la zona rural de Daraa, aunque las Fuerzas de Defensa de Israel aún no han confirmado estos hechos.
Se ha especificado que los ataques se centraron en las carreteras de Thala y Shaqra en Sueida y contra la 52ª Brigada en el distrito de Harak, en Daraa. Además, se menciona que hubo pérdidas humanas ya que en los lugares atacados se hallaban efectivos del Ministerio de Defensa sirio, sin embargo, no se han proporcionado detalles sobre el número de víctimas.
Desde el lunes, el ejército israelí ha estado activo en esta región siria, coincidiendo con un aumento de la violencia entre comunidades que ha dejado más de 200 muertos en enfrentamientos entre milicias drusas y beduinas. Aunque el martes se anunció un alto al fuego, los conflictos persisten en ciertas áreas de Sueida.
El Ministerio del Interior sirio ha descrito estos ataques israelíes como un hecho grave, y ha reportado que siguen los conflictos en algunos sectores de Sueida, donde grupos armados al margen de la ley han atacado nuevamente a las fuerzas de seguridad en un esfuerzo por desestabilizar la paz local, aunque estos han sido expulsados del centro de la ciudad.
Finalmente, las autoridades han decidido instalar puntos de seguridad y retirar vehículos militares y fuerzas de defensa, tras una reunión con el comandante de seguridad interna de Sueida, el general de brigada Ahmad al Dalati, y varios líderes locales, en respuesta a los deseos de los habitantes y con el objetivo de restaurar la tranquilidad.