Desde la Franja de Gaza, controlada por Hamás, se ha reportado que más de 1.500 palestinos han perdido la vida a manos de las fuerzas israelíes mientras esperaban recibir asistencia humanitaria. De estas víctimas, más de 1.100 fallecieron en instalaciones administradas por la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), que recientemente anunció el cese de sus actividades en la región.
Un comunicado emitido por la oficina de prensa gazatí, compartido en Telegram, destaca que “1.506 personas fueron asesinadas por las fuerzas de ocupación mientras esperaban a obtener ayuda, en situaciones que reflejan crímenes de hambre y asesinato”. Además, se documentó que “1.109 muertos fueron resultado de acciones de las fuerzas de ocupación dentro de estos centros israelí-estadounidenses, mediante disparos y ataques con artillería a civiles que buscaban alimento”.
El informe resalta que entre los fallecidos se encuentran “225 niños, 852 adultos y 32 ancianos”, y acusa a la GHF de ser “una fachada humanitaria fraudulenta que convirtió los centros de ayuda en trampas mortíferas y escenarios de asesinatos en masa”. La declaración enfatiza que “estas trampas se diseñaron y operaron dentro del sistema estadounidense-israelí, disfrazadas de labor humanitaria. Esta entidad fue un actor principal en la creación de masacres y un ejecutor clave del plan más atroz contra civiles a través del hambre y el genocidio en tiempos modernos”.
Se subrayó que “2.615 individuos murieron de hambre mientras eran tratados en hospitales” y se denunciaron estas acciones como “crímenes de guerra y contra la humanidad, en el marco de una política de genocidio inducido por el hambre”. “Consideramos a las autoridades ocupantes israelíes, a los oficiales de la GHF y a las entidades estadounidenses patrocinadoras de la GHF como totalmente responsables de estos crímenes, que no prescriben y serán perseguidos en todos los niveles”, concluyó el comunicado.
Finalmente, se reafirmó el compromiso de “documentar estos crímenes y presentar los archivos para que se administre justicia a nivel internacional, asegurando que ninguno de los implicados eluda su castigo”.
