La Global Sumud Flotilla ha declarado que la interceptación de sus embarcaciones en aguas internacionales por parte de Israel representa un crimen de guerra. Ha instado a una acción coordinada por parte de gobiernos y entidades internacionales para asegurar la seguridad de los arrestados y “exigir su liberación inmediata”.
En un comunicado, la flotilla detalló que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) establecieron un bloqueo en zonas marítimas donde “no tienen jurisdicción”, evidenciando el “bloqueo ilegal” sobre la Franja de Gaza. Los militares emplearon, además, cañones de agua y agua “contaminada”, y obstruyeron “sistemáticamente” las comunicaciones de los barcos, en lo que describen como nuevos actos de hostilidad hacia civiles desarmados.
La flotilla ha usado términos como “secuestro” y “detención ilegal” para describir los arrestos, y ha destacado que, a pesar de la interceptación, su compromiso de romper el bloqueo israelí y terminar con el “genocidio” en Gaza permanece inalterable.
“Cada acto de represión contra nuestra flotilla, cada escalada de violencia en Gaza y cada intento de reprimir las acciones de solidaridad solo fortalecen nuestra resolución”, afirmaron en su declaración.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Israel comunicó que ninguno de los barcos de la Global Sumud Flotilla había conseguido cruzar el “bloqueo naval” impuesto en Gaza y confirmó la detención de todos los activistas, a los cuales prometió deportar a Europa. “La provocación ha terminado”, concluyeron.