Delegaciones del Gobierno de Colombia y del grupo criminal Clan del Golfo, conocido igualmente como Ejército Gaitanista de Colombia, han cerrado este viernes en Doha, capital de Qatar, un entendimiento para poner en marcha desde marzo tres áreas de carácter temporal destinadas a la “ubicación progresiva” de sus combatientes.
Según lo pactado, los integrantes del Clan del Golfo serán trasladados a las localidades de Belén de Bajirá y Unguía, en el departamento de Chocó, así como a Tierralta, en el departamento de Córdoba, donde se concentrará parte de su estructura armada.
El acuerdo, suscrito por el jefe de la delegación del Ejecutivo, Álvaro Jiménez Millán, y el representante del Clan del Golfo, Luis Armando Pérez, incluye la “suspensión” para los combatientes reubicados “de la ejecución de las órdenes de captura, así como aquellas con fines de extradición”, según se recoge en el propio texto.
Además, las partes se comprometen a desarrollar “acciones humanitarias” específicas para establecer “las condiciones de salud de los integrantes del grupo armado en centros penitenciarios dentro y fuera del país”, tal y como ha indicado un comunicado difundido por la Presidencia colombiana.
El entendimiento sellado este viernes, alcanzado con el acompañamiento de un grupo de cinco países mediadores formado por Qatar, España, Noruega y Suiza, contempla igualmente la ampliación del plan piloto de sustitución de cultivos ilícitos a otros diez municipios adicionales situados en los departamentos de Córdoba, Antioquia y Bolívar.
Esta extensión del programa llega después de los compromisos alcanzados en septiembre, cuando se acordó impulsar la sustitución de cultivos en al menos cinco municipios donde opera el principal cartel del narcotráfico del país.
“El seguimiento, monitoreo y verificación de los compromisos estará a cargo de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de Estados Americanos (MAPP/OEA)”, ha señalado el texto, que detalla el papel de este organismo internacional en la supervisión del proceso.
En el documento firmado en Doha, tanto la delegación del Gobierno colombiano como el enviado del Clan del Golfo expresan su reconocimiento al Gobierno de Qatar y a los países que ejercen de mediadores, entre ellos España, por su respaldo a la mesa de diálogo.
“Convocamos a la sociedad colombiana a reafirmar la construcción de paz como un objetivo común a los intereses de todos los colombianos y colombianas, independiente de sus ideologías, credo o posición política”, concluye el comunicado conjunto.
