El ejecutivo de Israel, bajo la dirección de Benjamin Netanyahu, ha otorgado este jueves su aprobación al plan diseñado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que busca solucionar la situación de los rehenes en la Franja de Gaza y establecer un cese al fuego en el territorio palestino. El acuerdo permitirá el retorno de los cautivos tomados durante los ataques del 7 de octubre de 2023.
‘El Gobierno ha aprobado ahora el esquema para la liberación de todos los rehenes, tanto vivos como muertos’, comunicó la oficina de Netanyahu a través de un mensaje en la red social X.
La decisión del gabinete se postergó por más de tres horas debido a las objeciones de Itamar Ben Gvir, ministro de Seguridad Nacional y líder del partido ultraderechista Otzma Yehudit, respecto a la liberación de prisioneros palestinos durante una junta con altos oficiales de la Inteligencia israelí.
Antes de la aprobación del plan, Ben Gvir expresó en redes sociales su intención de votar en contra, junto con los miembros de su partido, argumentando que liberar ‘miles de terroristas’ sería un ‘precio insoportable a pagar’.
‘En las conversaciones que he mantenido con el primer ministro en los últimos días, le dejé claro que bajo ninguna circunstancia formaré parte de un gobierno que permita que Hamás siga gobernando en Gaza. Esto es una clara línea roja. El primer ministro se ha comprometido conmigo a que así sea’, declaró Ben Gvir.
Según Shosh Bedrosian, portavoz del Gobierno israelí, el cese al fuego se activará 24 horas después de la ratificación del plan, seguido por un período de 72 horas para la liberación de los rehenes aún en cautiverio.
El acuerdo de Trump contempla la entrega de 20 rehenes aún con vida y 28 cuerpos de los secuestrados, a cambio de la liberación por parte de Israel de 250 prisioneros palestinos con cadena perpetua y más de 1.700 gazatíes arrestados tras el 7 de octubre de 2023, incluidos menores.