El secretario general de la ONU, António Guterres, ha conversado este martes sobre la situación humanitaria «grave» en El Fasher con el primer ministro de Sudán, Kamil Idris. La conversación, que se llevó a cabo por teléfono, fue motivada por la solicitud reciente de Sudán a la ONU de tomar acciones para terminar el asedio en esta ciudad, impuesto por las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
En un breve comunicado, el representante de la ONU mencionó que durante la llamada también se discutió sobre «la protección de los civiles y el acceso humanitario», poniendo especial énfasis en El Fasher, afectada por el prolongado cerco y los ataques aéreos.
Desde hace días, el Gobierno sudanés ha instado a la ONU a abandonar las declaraciones y a implementar «medidas urgentes y decisivas» para desmantelar el asedio de las RSF, que llevan meses sobre la capital histórica de Darfur. Además, han pedido medidas para reconocer oficialmente a la milicia como una organización terrorista.
Mientras tanto, la lucha entre el ejército sudanés y las RSF por el control del aeropuerto internacional de la ciudad se ha intensificado, en medio de un severo brote de cólera que ha causado más de 300 muertes y 7.400 casos, afectando principalmente a los desplazados que huyen de los enfrentamientos.
La guerra en Sudán, que comenzó en abril de 2023 debido a desacuerdos sobre la integración de las RSF en el ejército nacional, ha precipitado una crisis humanitaria severa, convirtiendo al país en el escenario de la crisis de desplazados más grande del mundo.