António Guterres, secretario general de la ONU, ha manifestado su preocupación este miércoles por el “cambio inconstitucional de poder” en Madagascar, exhortando a todas las partes implicadas a trabajar conjuntamente para encontrar una “solución pacífica” que resuelva la situación de crisis en este país africano.
“El secretario general reitera la disposición de Naciones Unidas a seguir colaborando con Madagascar, la Unión Africana y la Comunidad de África Meridional para el Desarrollo (SADC) para el restablecimiento de la paz y la estabilidad en el país”, afirmó a través de un comunicado.
Por otro lado, un vocero del Departamento de Estado de EE. UU. ha informado a Europa Press que están “siguiendo de cerca la situación sobre el terreno” y urge a las partes a “buscar una solución pacífica” frente a la crisis política.
“La situación de seguridad está calmada, pero el Departamento permanece alerta para garantizar la seguridad de nuestra Embajada, nuestro personal y los ciudadanos estadounidenses en Madagascar”, destacó el portavoz.
El Tribunal Constitucional determinó el martes que la presidencia del país estaba vacante tras el anuncio de Andry Rajoelina sobre su huida a un “lugar seguro” no revelado, tras denunciar un intento de golpe de Estado. En consecuencia, Michael Randrianirina, jefe del Centro de Administración de Personal del Ejército (CAPSAT), asumió el mandato, quien el sábado se alió con los manifestantes.
Posteriormente, Randrianirina proclamó la formación de un Consejo de Defensa Nacional de Transición (CDNT), en una serie de acciones que incluyen la anulación de la Constitución de 2010 y la suspensión de varias entidades, como el Tribunal Constitucional y el Senado, tras una moción de censura aprobada por la Asamblea Popular contra Rajoelina, quien trató de prevenir la votación disolviendo la institución poco antes.