António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, ha instado a una reforma del Consejo de Seguridad coincidiendo con el octogésimo aniversario de la organización, subrayando que dicha reforma es ‘necesaria para mantener la seguridad y el orden’ a nivel mundial e implica ‘ampliar el número de miembros’ que lo componen.
‘Casi la mitad de las misiones de mantenimiento de paz de la ONU tienen lugar en África y, sin embargo, no tiene voz en este consejo’, expresó en un discurso, añadiendo que este ‘desequilibrio’ debe ser ‘corregido’. ‘Esto es necesario’, enfatizó.
De igual forma, Guterres señaló la subrepresentación de América Latina y el Caribe, a pesar de que ‘allí vive más de la mitad de la humanidad’. ‘Aumentar el número de países en el Consejo de Seguridad no es solo una cuestión de justicia, sino de resultados. Tiene el potencial de terminar con los bloqueos y ofrecer una mayor estabilidad’, destacó.
Asimismo, mencionó las propuestas de Francia y Reino Unido para ‘limitar el ejercicio de derecho a veto y pedir que sea examinado’, refiriéndose al privilegio que actualmente poseen solo cinco países: China, Reino Unido, Estados Unidos, Francia y Rusia. Recordó que son quince los países que integran el consejo.
Guterres resaltó que el ‘privilegio de sentarse a esa mesa también acarrea la responsabilidad de honrar a quienes representa’, mientras celebraba los logros del Consejo de Seguridad a lo largo de su historia. ‘Nos habéis dado 80 años sin una gran guerra’, declaró.
Por último, lamentó que ‘su legitimidad es frágil’ y que ‘muy a menudo sus miembros actúan por fuera de la Carta de Naciones Unidas’, lo que ‘socava la confianza en el proyecto de Naciones Unidas y nos pone a todos en peligro’. ‘Cuando una nación se salta las reglas, otra piensa que tiene potestad para hacer lo mismo, y la historia nos dice con brutal calidad adónde nos llevan estos caminos’, concluyó, subrayando que no se trata de ‘hegemonía’ o de ‘imperios’, sino de ‘padres que pierden a sus hijos, de refugiados sin hogar, de soldados que han sacrificado sus extremidades…’