La facción militar de Hamás, conocida como el brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámica, ha confirmado este martes su participación en el ataque del lunes contra un autobús en una intersección hacia Jerusalén, dejando un saldo de al menos seis personas fallecidas, incluido un ciudadano español.
«Reivindicamos nuestra responsabilidad en la operación armada que tuvo lugar en lunes por la mañana cerca del cruce del asentamiento de Ramot, en tierras de nuestro querido Jerusalén», expresó el grupo, identificando a los autores del atentado como dos «muyahidín» pertenecientes a la organización palestina.
El grupo también destacó que fue «una operación cualitativa» que «pilló por sorpresa» a las fuerzas de seguridad israelíes. «Es un claro mensaje de que sus intentos de secar las fuentes de la resistencia solo causarán el derramamiento de la sangre de sus soldados nazis y sus criminales colonos, allá donde menos lo esperen», continuaron.
«Subrayamos el fracaso de todos los intentos de la ocupación a la hora de crear un estado de disuasión a través de un castigo colectivo contra nuestro pueblo. Esos miserables intentos solo serán la mecha de una explosión mayor en su fea cara», afirmaron, mientras advertían que «la guerra de exterminio y agresión contra los lugares santos, la tierra y el pueblo (palestino) hará frente a la firmeza del pueblo y su valiente resistencia».
El ataque, ejecutado por dos palestinos que subieron al autobús en Ramot y dispararon a los pasajeros, concluyó cuando fueron «neutralizados» por un agente de seguridad y un civil armado «presente en la zona», según confirmaron fuentes policiales israelíes.