Herzog insiste en que un posible indulto a Netanyahu es decisión exclusiva de Israel

Herzog recalca que solo Israel decidirá sobre un posible indulto a Netanyahu y defiende la independencia judicial frente a las presiones de Trump.

Archivo - El presidente israelí, Isaac HerzogEuropa Press/Contacto/Yauhen Yerchak - Archivo

El presidente de Israel, Isaac Herzog, ha reiterado este sábado que cualquier resolución sobre un eventual indulto al primer ministro Benjamin Netanyahu —procesado por corrupción— es competencia única de las instituciones israelíes. De este modo, ha rechazado las presiones del presidente estadounidense, Donald Trump, y ha recalcado que cualquier determinación se adoptará pensando en el interés general de la ciudadanía del país.

En una entrevista concedida al medio estadounidense Politico, Herzog ha explicado que, aunque aprecia la relación personal y la opinión del expresidente, así como el papel que ha desempeñado en la liberación de rehenes en Gaza, Israel debe preservar su condición de Estado soberano y garantizar la autonomía plena de su sistema judicial frente a injerencias externas.

“Mi oficina ya ha recibido la solicitud de indulto, como saben. Hay un proceso que pasa por el Ministerio de Justicia, mi asesor legal, etc. Se trata sin duda de una solicitud extraordinaria y, al tratarla, consideraré el mejor interés del pueblo israelí. El bienestar del pueblo israelí es mi primera, segunda y tercera prioridad”, ha apostillado.

Netanyahu lleva más de cinco años sometido a un proceso judicial por presuntos delitos de fraude, abuso de confianza y soborno. A lo largo de este periodo, Trump ha pedido en varias ocasiones a Herzog que le otorgue el perdón presidencial, la más reciente mediante una carta enviada el pasado miércoles al jefe del Estado israelí y hecha pública por la propia Presidencia.

En esa misiva, el dirigente norteamericano admitía la independencia del poder judicial israelí, aunque sostenía que las acusaciones contra Netanyahu estarían impulsadas por motivaciones políticas.

Antes de ello, durante su visita a Israel el pasado mes de octubre, el exmandatario ya había abogado por que se aprobara el indulto, restando importancia al hecho de que el primer ministro hubiera aceptado obsequios de destacados multimillonarios.

El juicio contra Netanyahu se abrió en mayo de 2020 y gira en torno a tres causas separadas de corrupción, en las que se le imputa fraude, abuso de confianza y recepción de sobornos. La más relevante, el denominado Caso 4000, sostiene que el dirigente utilizó su cargo para favorecer al principal accionista de la compañía de telecomunicaciones Bezeq a cambio de una cobertura mediática positiva en un conocido portal de noticias, una acusación que el propio Netanyahu ha rechazado.

Personalizar cookies