El Gobierno de Hong Kong ha comunicado la formación de una comisión de investigación independiente, cuyo objetivo será determinar las causas del desastroso incendio que se produjo en un complejo de rascacielos en el distrito de Tai Po, suceso en el que hasta ahora se ha confirmado la muerte de 156 personas, mientras que otras treinta siguen desaparecidas.
En una reciente rueda de prensa, el jefe de Gobierno, John Lee, explicó que la comisión evaluará diversos aspectos, incluyendo el empleo de materiales no adecuados en las remodelaciones de las torres, factor que pudo contribuir a que el fuego se extendiera con rapidez.
Un juez liderará la comisión para «garantizar la independencia y la credibilidad» de la investigación.
Hasta la fecha, quince individuos han sido arrestados y enfrentan cargos por homicidio involuntario, incluidos dos directores y un consultor de ingeniería de Prestige Construction & Engineering, compañía responsable de las obras de renovación.
Adicionalmente, el Cuerpo de Bomberos ha señalado que hay evidencias de que los sistemas de alarma de los ocho edificios «podrían no haber funcionado correctamente».
