El grupo de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) instó el miércoles a la junta militar en Níger a liberar inmediatamente al expresidente Mohamed Bazoum, retenido casi dos años después de su deposición en un golpe liderado por Abdourahamane Tchiani.
Bazoum junto con su esposa, Hadiza Bazoum, fueron aprehendidos durante el golpe que llevó al establecimiento del Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria (CNSP). Desde entonces, se encuentran bajo custodia en el Palacio Presidencial de Niamey, aislados de familiares o representantes legales.
La junta militar de Níger demuestra su desprecio por el Estado de derecho cada día que mantiene detenido al expresidente Bazoum y a su esposa, ha dicho Ilaria Allegrozzi, investigadora de HRW para el Sahel. Su detención por motivos políticos y el proceso contra él desacreditan cualquier afirmación de la junta sobre un Níger más democrático, ha agregado.
En agosto de 2023, la junta militar anunció planes para enjuiciar al exmandatario por alta traición y socavar la seguridad nacional, aunque no se ha llevado a cabo el juicio a pesar de la eliminación de su inmunidad, en un proceso que HRW considera no cumplió con las normas del debido proceso.
Un grupo de trabajo de la ONU declaró en febrero de 2025 que la detención de Bazoum y su cónyuge era arbitraria y contraria al Derecho Internacional Humanitario, por lo que Reed Brody, del equipo legal del expresidente, ha subrayado que el exmandatario se encuentra encerrado de forma cruel e ilegal, sin que se hayan presentado cargos contra él y sin que pueda hablar con sus hijos, sus seguidores o sus abogados.
A pesar de los claros fallos de tribunales internacionales y organismos de la ONU que exigen su liberación, sigue siendo rehén de una junta militar, ha manifestado Brody, después de que un tribunal de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) que Níger abandonó tras la asonada reclamara en 2024 su liberación y tildara de arbitrario su arresto.
Por todo ello, Allegrozzi ha insistido en que cada día que Bazoum pasa detenido aleja a Níger del camino democrático. Dos años después, las autoridades de Níger deben reconsiderar qué tipo de mensaje envía su continuada detención a toda la región y al mundo, ha apostillado.