Desde el inicio de 2025, la violencia en la comunidad árabe israelí ha alcanzado niveles alarmantes, con casi 200 víctimas mortales hasta la fecha, en su mayoría a causa de conflictos entre clanes mafiosos. La organización Iniciativas de Abraham, que monitorea estos incidentes, reporta que ya se han contabilizado 194 muertes, incluyendo recientemente a un hombre de 50 años en la baja Galilea y a un joven de 21 años en Rahat.
Estos datos muestran un aumento del 9% en comparación con el año anterior, con seis asesinatos solo desde octubre. Daniel Levy, comisario jefe de la Policía de Israel, describió la situación el 20 de abril como ‘un monstruo’ social, exacerbado por la pobreza y las bandas criminales.
El ascenso de Itamar Ben Gvir como ministro de Seguridad y la guerra en Gaza han intensificado la crisis. Bajo su primer año de mandato en 2023, las tasas de homicidios en esta comunidad se dispararon, llegando a duplicar las del año previo tras la eliminación de un programa anti-crimen esencial.