El juicio sin precedentes contra Jair Bolsonaro, exmandatario de Brasil, acusado por la Fiscalía de encabezar una organización criminal armada para subvertir los resultados de las elecciones de 2022, comenzó este martes. La seguridad fue intensificada notablemente y Bolsonaro no estuvo presente debido a recomendaciones médicas tras un ataque previo en 2018.
Declaraciones en el juicio
«La función del Supremo Tribunal Federal es juzgar con imparcialidad y aplicar justicia en cada caso específico, sin importar amenazas ni coerción, ignorando presiones internas o externas», destacó el juez Alexandre de Moraes durante la apertura, que se extenderá hasta el 12 de septiembre.
Paulo Gonet, el fiscal general, argumentó que no sancionar los intentos de alterar el orden constitucional «intensificará los impulsos autoritarios y pone en peligro un modo de vida civilizado».
Contexto del asalto y acusaciones
El 8 de enero de 2023, simpatizantes de Bolsonaro, descontentos con la asunción de Luiz Inácio Lula da Silva, asaltaron la plaza de los Tres Poderes en Brasilia, generando daños valorados en más de 20 millones de reales. La Fiscalía acusa a Bolsonaro de utilizar el estado para un plan «deliberado» llamado ‘Puñal Verde y Amarillo’ para impedir que Lula asumiera el cargo.
Detalles de la acusación
Liderados por Mauro Cid, excolaborador de Bolsonaro que colaboró con la justicia, el plan incluía el asesinato de figuras públicas. Además, Bolsonaro habría estado directamente involucrado en la redacción de un decreto para presionar a las Fuerzas Armadas, según el informe de Gonet.
Los delitos y posibles consecuencias
Bolsonaro y sus cómplices enfrentan cargos por intento de golpe de Estado y otros delitos, que podrían resultar en más de 40 años de prisión y la inhabilitación indefinida de Bolsonaro para cargos públicos.