Este miércoles, desde Irán, se ha hecho una exhibición del progreso en su sector armamentístico advirtiendo que emplearán sus recientes misiles contra Israel si este “emprende otra aventura” como la ocurrida hace unos meses, que involucró doce días de enfrentamientos aéreos.
“Hemos fabricado y poseemos misiles con capacidades mucho mayores que los misiles anteriores, y si el enemigo sionista emprende otra aventura, sin duda los utilizaremos”, declaró Amir Nasirzadé, ministro de Defensa de Irán.
Nasirzadé ha remarcado que los proyectiles usados en la última contienda contra Israel fueron producidos “hace unos años” por su industria militar, la cual “no dependió en absoluto de recursos extranjeros” para su defensa.
“Todo lo utilizado en la guerra fue fabricado por las industrias de defensa del país. El mundo vio cómo los misiles impactaron completamente en sus objetivos y causaron graves daños al enemigo sionista”, según informes de la agencia IRNA.
El ministro también comentó que a pesar de la “censura mediática del régimen sionista”, no se pudo ocultar el alcance de los ataques de Irán, y destacó que, aunque inicialmente Israel solo detuvo el 40 por ciento de los misiles, hacia el final de los enfrentamientos, “el 90 por ciento” de los proyectiles alcanzaron sus blancos. “Demostró claramente que nuestra experiencia había aumentado y sus defensas habían disminuido”, explicó.
Nasirzadé señaló que en esos días, la confrontación no fue solo contra Israel, sino también contra Estados Unidos y varios aliados occidentales y regionales que apoyaron la defensa del “régimen sionista”.
“Nosotros dependíamos de nuestras propias capacidades nacionales debido a las sanciones ilegítimas de Estados Unidos”, mencionó Nasirzadé, quien criticó que Israel atacara instalaciones civiles y científicas, en contraste con Irán, que se centró en bases militares y centros de inteligencia.
La serie de ataques comenzó el 13 de junio y duró doce días, en los cuales Estados Unidos también intervino atacando tres instalaciones nucleares. El saldo fue de cerca de mil muertos, la mayoría en suelo iraní.