El gobierno de Irán anunció que Rouzbeh Vadi, quien fue ejecutado recientemente, estaba acusado de espiar para el Mossad, el organismo de inteligencia de Israel, y se desempeñaba como ‘científico nuclear’.
Vadi fue sentenciado por colaborar y espiar a favor de los servicios secretos israelíes tras descubrirse evidencias de sus encuentros con agentes israelíes en Viena, la capital de Austria.
Según reportes de la televisora estatal IRIB, que también mostró un vídeo del mismo Vadi confesando, dijo haber transmitido datos relevantes sobre las instalaciones nucleares de Fordo y Natanz. ‘Me pidieron que les enviara todo’, enfatizó.
El acusado destacó la importancia del manejo del material nuclear en esas locaciones, crucial para el programa de enriquecimiento de uranio de Irán.
El miércoles, el Centro de Medios Judiciales de Irán confirmó la ejecución de Vadi tras hallarlo culpable de espionaje y colaboración con el estado israelí.
