Las autoridades militares de Israel han justificado el reciente ataque al hospital Nasser, situado en el sur de la Franja de Gaza, citando la instalación de una cámara por Hamás en dicho recinto, la cual presuntamente se utilizaba para monitorear a sus fuerzas armadas.
En un informe detallado emitido por Yaniv Asor, comandante del Mando Sur, al líder del Ejército, Eyal Zamir, se reveló que las fuerzas de la Brigada Golani realizaron la operación en el hospital Nasser para neutralizar la mencionada «amenaza».
El informe del Ejército israelí destaca que existen «pruebas del uso militar de hospitales» por milicias palestinas, y se apoya además en «información de Inteligencia que confirma» el uso del hospital por parte de Hamás para actividades terroristas.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han identificado a al menos seis de los fallecidos en el ataque al hospital Nasser como «terroristas», incluyendo a uno implicado en los ataques del 7 de octubre de 2023. Eyal Zamir ha criticado a las milicias palestinas por «explotar cínicamente lugares sensibles e infraestructura civil» con fines terroristas, y ha ordenado una revisión exhaustiva del proceso de autorización y las decisiones tomadas en el terreno.
Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, afiliado a Hamás, el ataque inicial impactó en el cuarto piso del hospital. Un segundo impacto ocurrió al mismo tiempo que las ambulancias llegaban al lugar. A pesar de las críticas, el Ejército de Israel ha aclarado que nunca ha atacado deliberadamente a periodistas tras un incidente que dejó al menos 20 muertos, incluidos trabajadores de la salud y periodistas, según fuentes de Gaza.