Este viernes, el Ejército de Israel ha comunicado la neutralización de una supuesta célula en Cisjordania especializada en la producción de cohetes destinados a ser lanzados contra Israel. La revelación sigue al descubrimiento, la semana anterior, de un intento de ataque con proyectiles desde la localidad de Kafr Nima.
En un comunicado, el Ejército israelí especificó que la intervención se llevó a cabo en las inmediaciones de Ramala el jueves por la noche con el objetivo de “detener a los integrantes de una célula terrorista sospechosa de haber ejecutado el lanzamiento de un cohete desde Kafr Nima la semana pasada”.
“Durante la operación, las fuerzas de seguridad rodearon un edificio donde se ocultaban los sospechosos y abrieron fuego. Tras el enfrentamiento, los tres individuos salieron del edificio y fueron detenidos”, indicó el comunicado, agregando que se confiscaron dos cohetes, numerosas municiones y explosivos.
Además, se descubrió un torno utilizado para la fabricación de cohetes en Ramala. “Al concluir la operación, se destruyeron tanto los cohetes como los explosivos incautados. Los detenidos han sido entregados al Servicio de Seguridad General para su investigación”, añadió.
Posteriormente, Gideon Saar, ministro de Exteriores de Israel, criticó a la Autoridad Palestina por “su falta de acción contra el terrorismo y por seguir adelante con su política de ‘pagar por matar’, pese a sus compromisos previos”. “Esto demuestra el grave riesgo que supondría la creación de un ‘Estado palestino’”, declaró.
“Si Israel no conserva el control de seguridad sobre Judea y Samaria, todo el Estado de Israel correría peligro”, señaló Saar en su cuenta de la red social X.
Desde el ataque del 7 de octubre de 2023, que resultó en aproximadamente 1.200 muertes y cerca de 250 secuestros, según fuentes israelíes, Cisjordania y Jerusalén Este han visto un incremento en las operaciones israelíes. Estos territorios ya habían experimentado un número récord de muertes en los primeros nueve meses del año.
