Tras un ataque letal que acabó con la vida de dos soldados israelíes, Israel ha procedido al cierre de dos puntos de tránsito fronterizos con Jordania. El incidente tuvo lugar el jueves en el cruce de Allenby/Rey Hussein, situado en la frontera entre Jordania y Cisjordania, bajo control militar israelí.
La Autoridad de Aeropuertos de Israel ha declarado el cierre indefinido tanto del paso de Allenby —conocido así en Israel— que enlaza Jordania con Cisjordania, como del paso Río Jordán, según informaciones del periódico ‘The Times of Israel’.
En respuesta al suceso, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha demandado la implementación de nuevas medidas de seguridad para los camiones que transportan ayuda a la Franja de Gaza desde Jordania. En una reunión de su gabinete, Netanyahu propuso: «Pido que los conductores pasen por detectores de metales desde ahora y que los camiones sean inspeccionados de forma exhaustiva». Además, criticó a Jordania por no prevenir el ataque, destacando: «Era responsabilidad de Jordania evitar el ataque, y no lo hizo».
El atacante, un ciudadano jordano y conductor de un camión de ayuda humanitaria, fue abatido en el acto. El Ejército israelí ha solicitado al Gobierno jordano detener el envío de estos suministros. Por su parte, el Gobierno de Jordania condenó el ataque, calificándolo de «una violación de la ley y una amenaza para los intereses del reino y su capacidad para entregar ayuda humanitaria en la Franja de Gaza». Mientras tanto, Hamás ha elogiado el ataque, describiéndolo como «un claro mensaje» a Israel de que sus «políticas de genocidio (…) no quedarán sin respuesta».
Este paso fronterizo se localiza en un puente sobre el río Jordán y es el único acceso terrestre para los palestinos de Cisjordania y Jerusalén Este hacia el extranjero, siendo administrado por Israel.