La Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), principal sindicato de Italia, ha convocado una huelga general para este viernes en reacción a la interceptación israelí de la flotilla Global Sumud, que buscaba entregar asistencia humanitaria en Gaza.
El pasado 22 de septiembre, Italia experimentó una huelga en apoyo al pueblo palestino, organizada únicamente por la Unión Sindical de Base (USB). Sin embargo, la huelga de este viernes promete ser mucho más concurrida, especialmente después de que el miércoles por la noche, cerca de 10.000 personas se manifestaran frente a la embajada israelí en Roma.
“El ataque a embarcaciones civiles que transportaban ciudadanos italianos representa un asunto de extrema gravedad”, ha declarado la CGIL al anunciar la huelga, que afectará tanto al sector público como al privado. El sindicato también ha criticado al gobierno por “abandonar” a ciudadanos italianos en aguas internacionales.
La primera ministra, Giorgia Meloni, desde Copenhague, ha cuestionado la huelga, argumentando que los problemas que puedan surgir de estas movilizaciones están más relacionados con la política interna italiana que con la defensa de los derechos palestinos. Meloni ha comentado sarcásticamente sobre la elección del viernes para la huelga, diciendo «El fin de semana largo y la revolución no van de la mano», durante su llegada a la reunión de la Comunidad Política Europea.