En un movimiento controvertido, el presidente de Argentina, Javier Milei, ha anulado mediante decreto durante la madrugada del lunes las tres legislaciones que proporcionaban beneficios a los pensionados, las cuales fueron ratificadas por el Congreso el jueves anterior. Milei justificó su decisión alegando ‘graves deficiencias técnicas’ y el deseo de evitar que ‘el Gobierno caiga en viejas prácticas inconducentes’.
‘La sanción de los proyectos de ley en examen implica la aprobación de gastos exorbitantes sin su correspondiente partida presupuestaria, lo que conllevaría que, para su eventual cumplimiento, el Gobierno caiga en las viejas prácticas de la emisión monetaria sin respaldo, el aumento de impuestos o el endeudamiento, recetas que, luego de más de 100 años de historia, ya han sido probadas inconducentes’, señala el decreto 534/2025 firmado por Milei y publicado en el Boletín Oficial.
Además, Milei señaló ‘graves vicios reglamentarios’ en el procedimiento de aprobación de las leyes en el Senado y mencionó también ‘graves deficiencias técnicas’, así como una financiación ‘manifiestamente insuficiente’.
Con esta medida, Milei ha bloqueado la implementación de tres leyes que habrían incrementado las pensiones, restablecido la moratoria de la jubilación y otorgado nuevas pensiones no contributivas a individuos con discapacidad.
De acuerdo con Milei, la implementación de estas leyes habría representado un gasto adicional considerable, estimado en 7.000 millones de pesos (4.470.000 euros) para 2025 y 17.000 millones de pesos (10.860.000 euros) para 2026, lo que equivaldría, respectivamente, al 0,9 y al 1,68 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), además de un aumento del 6 por ciento sobre el gasto previsto.