Musalia Mudavadi, ministro de Exteriores de Kenia, ha revelado que “más de 200 kenianos”, incluidos exmiembros militares, han sido reclutados por el Ejército ruso, a través de redes detectadas recientemente. A finales de septiembre, las autoridades intervinieron en un caso donde 21 kenianos fueron “engañados” y estaban listos para ser enviados a luchar.
Desde el comienzo de la invasión en 2022, Mudavadi señala que el reclutamiento en Rusia ha incluido a africanos, con kenianos entre ellos. Además, ha indicado que las redes de reclutamiento están activas tanto en Kenia como en Rusia, con continuas consultas por parte de familias preocupadas por parientes involucrados en el conflicto.
El ministro detalló una operación de las fuerzas de seguridad en Athi River, a 30 kilómetros de Nairobi, donde se detuvo a un agente responsable de reclutar kenianos bajo falsas ofertas de empleo en el extranjero. Los reclutados firmaban contratos con agencias que les ofrecían hasta 18.000 dólares por visas y gastos de viaje, sin informarles adecuadamente sobre las peligrosas tareas que realizarían, como el ensamblaje de drones y la manipulación de productos químicos sin la formación ni el equipo de protección necesarios.
Esta denuncia surge poco después de que el ministro de Exteriores ucraniano cifrase en más de 1.436 los africanos luchando para Rusia, instando a desarticular estas redes de reclutamiento. En paralelo, el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, reportó que varios sudafricanos han pedido ayuda desde el frente, aunque no especificó el bando al que pertenecen.











