El mandatario norcoreano, Kim Jong Un, ha estado al frente de un ensayo de un cohete de propulsión sólida destinado a misiles intercontinentales que pueden equipar ojivas nucleares, en un contexto de avances de Pyongyang en el fortalecimiento de su arsenal militar dada la tensión en la península coreana.
De acuerdo con lo reportado por KCNA, la agencia de noticias estatal de Corea del Norte, el ensayo se realizó el lunes y representa la novena y última fase en el ‘proceso de desarrollo’ del mencionado cohete, que ha sido fabricado con ‘fibra de carbono’. Este detalle sugiere que pronto podría llevarse a cabo una prueba de un nuevo misil balístico intercontinental.
Kim resaltó los progresos del programa y mencionó que el ensayo fue ‘un éxito’ dentro de la ‘modernización de la tecnología defensiva’. ‘Marca un cambio significativo a la hora de expandir y fortalecer a las fuerzas estratégicas nucleares de Corea del Norte’, afirmó.
Este ensayo ocurrió aproximadamente una semana después de que Corea del Norte presentara su nuevo misil ‘Hwasong-20’. Este evento tuvo lugar poco tiempo después de que Kim visitara China, donde se encontró con los líderes Xi Jinping y Vladimir Putin, marcando su primera visita a Pekín en seis años.