El secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abulgheit, ha denunciado este viernes que la decisión del Gobierno israelí de reconocer al estado separatista somalí de Somalilandia constituye una acción “provocadora e inaceptable” que podría “socavar la estabilidad regional”.
Abulgheit ha subrayado que este paso representa “una clara violación de las normas del Derecho Internacional” y “una flagrante violación del principio de unidad y soberanía de los Estados, que constituye un pilar fundamental de la Carta de Naciones Unidas y de las relaciones internacionales”.
En un comunicado difundido en redes sociales, ha recalcado que “esta medida, adoptada por una potencia ocupante que comete a diario graves violaciones contra el pueblo palestino y los vecinos de los territorios palestinos, haciendo caso omiso de las resoluciones que cuentan con legitimidad internacional, equivale a un ataque israelí a la soberanía de un Estado árabe y africano”.
El responsable de la organización panárabe ha alertado además de que la decisión supone “un intento de cooperar con terceros para socavar la estabilidad regional” en “total desprecio” por las normas que rigen el Derecho Internacional.
Por su parte, el portavoz del secretario general, Gamal Roshdy, ha insistido en que la zona de Somalilandia es “parte integral de la República Federal de Somalia”, un Estado soberano y reconocido internacionalmente, por lo que “cualquier intento de imponer un reconocimiento unilateral constituye una injerencia inaceptable en los asuntos internos” del país.
Israel ya había otorgado previamente un reconocimiento a la independencia de Somalilandia, aunque en un escenario muy distinto: en 1960, durante los cinco días de existencia del llamado Estado de Somalilandia. El actual ente separatista proclamó su independencia en 1991 y, pese a mantener ciertos vínculos diplomáticos con diversos países, hasta ahora ningún miembro de la ONU había reconocido su condición de Estado.
Somalia ha condenado con rotundidad el movimiento de Israel en una declaración conjunta con Egipto, Turquía y Yibuti, en la que han expresado su temor a que el acuerdo con Somalilandia esté directamente relacionado con la guerra de Gaza y que el territorio separatista somalí pueda convertirse en posible destino de un desplazamiento forzado e ilegal de la población palestina.
“Las partes enfatizan el rechazo categórico a cualquier plan para desplazar al pueblo palestino fuera de su territorio, que la gran mayoría de los países del mundo rechazan de forma, fondo y categóricamente”, han remachado en el texto.