La Unión Europea ha valorado positivamente el alto el fuego anunciado este sábado entre Tailandia y Camboya, acordado para poner punto final al último repunte del conflicto fronterizo entre ambos países, que en apenas dos semanas ha provocado cerca de 100 fallecidos.
La crisis se ha intensificado en los últimos días a raíz de nuevos ataques en la franja limítrofe, donde a lo largo de este mes de diciembre se han contabilizado ya 96 muertos en ambos lados de la frontera. Según las autoridades tailandesas, han perdido la vida 23 militares, a los que se suman 42 civiles, mientras que en territorio camboyano se han registrado otros 31 civiles fallecidos.
Durante las últimas semanas, los dos gobiernos se han acusado mutuamente de llevar a cabo provocaciones en la línea fronteriza, reactivando la escalada de julio que terminó con el acuerdo mencionado y que, en apenas cinco días, causó medio centenar de muertos y el desplazamiento de cientos de miles de personas.
En este escenario, “la Unión Europea da la bienvenida al alto el fuego firmado hoy por Camboyas y Tailandia” y, al mismo tiempo, insta a las dos partes a actuar con “buena fe” para garantizar su cumplimiento y evitar un nuevo estallido de violencia.
Asimismo, la UE expresa su reconocimiento a la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN) por su tarea de mediación y el “papel positivo” desempeñado para alcanzar este resultado.
El comunicado comunitario concluye subrayando que Bruselas está dispuesta a proporcionar “el respaldo que haga falta” con el fin de afianzar el cese de la violencia.