Durante su primera visita a Corea del Sur en más de una década, el presidente chino Xi Jinping ha sido abordado por Lee Jae Myung, su homólogo surcoreano, con el fin de desempeñar un papel crucial en la reanudación de los contactos con Corea del Norte.
Esta semana, Xi Jinping ha visitado Gyeongju, China, para asistir al foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), donde ha sostenido diálogos con varios líderes mundiales, incluido el presidente de EEUU, Donald Trump.
Lee ha apelado a Xi para que tenga una influencia «constructiva» en las tensiones con Pyongyang, dada la significativa influencia que China ejerce sobre el régimen norcoreano.
«Espero que la República de Corea y China», señaló Xi al llegar, usando el nombre oficial de Corea del Sur, «fortalezcan su comunicación estratégica, aprovechen estas circunstancias y trabajen para reanudar el diálogo con Corea del Norte», expresó.
«Nunca se podrá insistir lo suficiente en la importancia de la seguridad regional», agregó el presidente chino, según lo reportado por la agencia oficial de noticias surcoreana, Yonhap.
Mientras que Yoon Suk Yeol, predecesor de Lee, se enfocó en reforzar los vínculos de defensa y económicos con Estados Unidos y Japón, Lee ha optado por un enfoque más equilibrado y ha sido cauteloso al posicionarse en la creciente rivalidad entre Estados Unidos y China.
Los lazos económicos entre Corea del Sur y China han menguado en los últimos años, afectados por la intensa competencia de las empresas coreanas en China y las consecuencias de una disputa anterior sobre un sistema de defensa antimisiles estadounidense. Las tensiones se intensificaron cuando Pekín impuso sanciones a las filiales estadounidenses de Hanwha Ocean Co. por sus planes de inversión en Estados Unidos.
«Las relaciones entre Corea del Sur y China pueden parecer sin problemas significativos en superficie, pero en realidad, es difícil afirmar que se hayan normalizado o restablecido completamente», declaró Lee en esa ocasión. Su oficina indicó luego que la reunión demostraba que el «restablecimiento total» de las relaciones está en curso.
Lee expresó a Xi Jinping que valora los frecuentes intercambios de alto nivel entre China y Corea del Norte, y que espera intensificar la comunicación estratégica con Pekín para fomentar las condiciones adecuadas para dialogar con Pyongyang.
Por otro lado, las autoridades norcoreanas minimizaron los preparativos de la reunión asegurando que cualquier intento de desmantelar su programa nuclear es simplemente una «quimera que jamás va ocurrir».















