El Gobierno del Líbano ha anunciado que el próximo 19 de diciembre se llevarán a cabo nuevas negociaciones con delegados de Israel. Estas conversaciones se enmarcan en los esfuerzos por supervisar el cumplimiento del cese al fuego que se estableció hace más de un año en la región.
“Es obvio que la primera sesión no ha sido muy productiva, pero ha sentado las bases para futuras sesiones que comenzarán el 19 de este mes”, declaró Paul Morcos, ministro de Información libanés, en una conferencia de prensa tras la reunión del gabinete presidencial en el Palacio de Baabda.
A pesar de las dificultades iniciales, Morcos destacó que «las reacciones a la primera reunión han sido positivas» y subrayó la importancia de capitalizar este momento para prevenir una «segunda guerra» en Líbano, tal como reportó la agencia NNA.
Este nuevo encuentro se produce tras la reunión previa de las delegaciones de ambos países en Naqura, Líbano, donde se encuentra la sede de la FINUL. La delegación israelí fue liderada por Uri Resnick y la libanesa por el exembajador Simon Karam. Morgan Ortagus, enviada especial adjunta de EE.UU. para Oriente Próximo, también participó, según la Embajada estadounidense en Beirut.
Recientemente, la FINUL ha registrado más de 10.000 infracciones israelíes al acuerdo de cese al fuego con Hezbolá desde finales de noviembre de 2024. Paralelamente, el Ejército israelí ha intensificado los bombardeos en el sur de Líbano tras emitir «advertencias urgentes» a los residentes de cuatro localidades sobre ataques a supuestas «infraestructuras militares» de Hezbolá.
El acuerdo de cese al fuego, que finalizó meses de combates iniciados el 7 de octubre de 2023, exigía la retirada de tropas de Israel y Hezbolá del sur de Líbano. A pesar de esto, Israel mantiene cinco posiciones militares en el territorio, lo que ha generado críticas tanto de Líbano como de Hezbolá, quienes demandan el fin de este despliegue.











