La Justicia boliviana ha concedido la libertad a Marco Antonio Pumari, exlíder sindical, y ha impuesto arresto domiciliario a Luis Fernando Camacho, exgobernador de Santa Cruz, relacionados con la crisis política de 2019 tras la autoproclamación de Jeanine Áñez como presidenta.
El Tribunal Supremo ha decidido poner fin a la detención preventiva de ambos políticos. En el caso de Camacho, la medida incluye con salida laboral, el pago de una indemnización y su presentación mensual ante las autoridades, tal como mencionó su defensa al diario ‘El Deber’.
La defensa de Pumari ha expresado satisfacción por el fallo, que ha otorgado la libertad pura y simple para su cliente, quien deberá seguir algunos procedimientos burocráticos en Potosí, según lo informado.
Este fallo se produce en un contexto de alta tensión, con advertencias de protestas por parte de seguidores de Evo Morales si se liberaba a los acusados. Al inicio de semana, un juez también suspendió las medidas cautelares contra Áñez y otros implicados en la violencia de 2019.
Áñez, por su parte, afronta acusaciones por las muertes ocurridas bajo su gobierno interino, especialmente en Senkata y Sacaba, donde la represión fue especialmente grave. Recientemente, un tribunal de El Alto ha anulado el proceso judicial contra ella por el caso de Senkata, argumentando que debe ser juzgada en el Parlamento.