Este martes, el Tribunal de Primera Instancia de Túnez sentenció a Rachid Ghanuchi, líder del movimiento islamista Ennahda y encarcelado desde abril de 2023, a 14 años de reclusión dentro de un juicio que también involucró a cerca de 20 figuras políticas, las cuales enfrentaron condenas de hasta 35 años por supuestamente conspirar contra el Estado.
Además, el tribunal ha decretado que tanto Ghanuchi como los otros 20 acusados, entre los que se encuentran políticos, exministros, personal de seguridad y exparlamentarios, estarán bajo supervisión administrativa durante cinco años por múltiples cargos relacionados con actividades terroristas, incluyendo la formación de un grupo terrorista y la conspiración contra la seguridad interna del Estado.
Ghanuchi se abstuvo de asistir al juicio en protesta por la falta de garantías para un juicio justo, de acuerdo con lo declarado por su defensa. Sus abogados han cuestionado el fallo, argumentando que no se permitió demostrar la inocencia de Ghanuchi y criticando que las acusaciones se basaron en el testimonio de un testigo secreto y anónimo que luego se retractó de la mayoría de sus declaraciones.
El equipo legal de Ghanuchi ha enfatizado su compromiso con la defensa de sus derechos fundamentales y la presunción de inocencia. Por otro lado, Ghanuchi, quien ha sido una figura prominente en la oposición al presidente Kais Saied y fue presidente del Parlamento disuelto en 2021, ya había sido previamente condenado en casos relacionados con financiación ilegal y apología del terrorismo.
La oposición, representada principalmente por el Frente de Salvación Nacional, ha criticado la tendencia autoritaria del presidente Saied durante los últimos tres años y ha solicitado su renuncia, especialmente tras las numerosas detenciones de opositores y la pobre participación en procesos electorales recientes en el país.















