Esta mañana, 64 surcoreanos que habían sido retenidos en Camboya a raíz de una operación policial contra las estafas, han vuelto a su país. Su llegada se produce en un contexto de tensiones bilaterales tras el fallecimiento de un estudiante surcoreano en una zona notoria por estas actividades ilícitas.
El vuelo de Korean Air que los trasladaba aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Incheon a las 08:35, tras despegar unas cinco horas antes del Aeropuerto Internacional de Techo, ubicado cerca de Nom Pen, según reportó la agencia de noticias Yonhap.
Wi Sung Lac, asesor de Seguridad Nacional de Corea del Sur, ha coordinado el envío de un equipo investigador a Camboya para colaborar con las autoridades locales en esclarecer las circunstancias de la muerte del estudiante. Aunque Wi celebró el regreso de los ciudadanos, recordó que estaban detenidos por estar implicados en investigaciones sobre fraude.
‘La mayoría de los retornados están bajo sospecha de haber cometido delitos y existen órdenes de arresto en su contra, por lo que su regreso se manejará con los procedimientos legales adecuados’, informó Wi en una conferencia de prensa citada por Yonhap. A su llegada, los surcoreanos fueron detenidos y llevados a comisarías para ser interrogados sobre su posible implicación en delitos.
El primer ministro de Camboya, Hun Manet, expresó su ‘profundo pesar’ por el asesinato del estudiante, quien, según investigaciones preliminares, fue torturado mientras estaba cautivo en una red de estafadores en línea.