El mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha expresado su reprobación el día de hoy frente a la acción de Estados Unidos de cancelar los visados de los jueces del Tribunal Supremo de Brasil, incluyendo a su presidente, Alexandre de Moraes, luego de que se aplicaran medidas cautelares en contra del exmandatario Jair Bolsonaro relativas a una financiación de actividades en Estados Unidos para proclamar su inocencia.
«Mi solidaridad y apoyo a los magistrados del Tribunal Supremo Federal, quienes se han visto afectados por otra medida arbitraria y completamente infundada del gobierno de Estados Unidos», ha declarado Lula en una publicación en su perfil de X.
Según investigaciones, Bolsonaro habría destinado cerca de dos millones de reales (300.000 euros) para promover una campaña a través de su hijo, Eduardo, en Estados Unidos desde marzo, apoyando estas sanciones, en un contexto donde el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, ha tomado partido críticamente en el asunto judicial de su aliado.
El Departamento de Estado de EEUU justificó su acción argumentando que Bolsonaro era víctima de una «cacería política» orquestada por el juez De Moraes, quien ha establecido «un complejo de persecución y censura tan amplio que no solo viola los derechos fundamentales de los brasileños, sino que también impacta a ciudadanos estadounidenses».
Lula ha rechazado rotundamente este argumento y ha denunciado la medida estadounidense como una intromisión en su sistema judicial que resulta «inaceptable y viola los principios básicos de respeto y soberanía entre naciones».
«Tengo la certeza de que ningún tipo de intimidación o amenaza, de nadie, comprometerá la misión más importante de los poderes e instituciones de la nación: defender y preservar permanentemente el Estado de derecho democrático», enfatizó el presidente Lula al concluir sus comentarios.
