El presidente francés, Emmanuel Macron, ha expresado su repulsa por el bombardeo realizado por el Ejército de Israel al hospital Nasser, ubicado en el sur de Gaza, que provocó la muerte de cuatro periodistas y varias otras personas. Este hecho lo comunicó durante una llamada con el emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Thani, quien enfatizó que las víctimas eran civiles inocentes desarmados.
En palabras de Macron, ‘Acabo de hablar con el emir de Qatar. Hablamos de la dramática situación en Gaza. Reducir a la población a la inanición es un crimen que debe cesar de inmediato’, según declaró en su cuenta de la red social X, condenando el ataque israelí y exigiendo al Gobierno de Israel que respete el Derecho Internacional.
El presidente francés también subrayó la necesidad de proteger a civiles y periodistas bajo cualquier circunstancia y recordó la importancia de que los medios de comunicación trabajen con libertad e independencia para informar sobre la realidad del conflicto. Asimismo, mencionó que está colaborando estrechamente con Qatar para facilitar el éxito de los mediadores y lograr un acuerdo con Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) que contemple un alto el fuego duradero, la liberación de todos los rehenes, la distribución de ayuda humanitaria y una solución política que incluya el desarme de Hamás y una misión de estabilización.
Además, Macron ha extendido esta cooperación con Qatar hacia la organización de una conferencia sobre la solución de dos Estados, programada para el 22 de septiembre en Nueva York, donde se prevé el reconocimiento formal del Estado de Palestina.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Qatar también ha condenado el ataque al hospital en Jan Yunis, destacando que ‘causó la muerte de civiles inocentes desarmados’ y constituye una violación flagrante del Derecho Internacional. El comunicado finaliza instando a una acción internacional inmediata para proteger a la población civil y asegurar que los responsables de estas atrocidades sean llevados ante la justicia.
En total, más de 62.700 personas han perdido la vida en el enclave palestino desde el inicio de la ofensiva militar por parte del Ejército de Israel en octubre de 2023. El gobierno de Benjamin Netanyahu ha decidido intensificar estas operaciones con varios objetivos, incluyendo el control sobre la ciudad de Gaza.