El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado la movilización de 4,5 millones de milicianos a lo largo del territorio nacional esta semana, como parte de su ‘plan de paz’ para asegurar la ‘tranquilidad y la soberanía’ frente a amenazas foráneas.
Maduro ha descrito esta acción como ‘otro elemento clave’ en su estrategia para el país, que contempla la activación de ‘toda la capacidad miliciana en el territorio y por sectores’. En un encuentro televisado con gobernadores y alcaldes, afirmó que la implementación será ‘palmo a palmo’.
‘La milicia tiene dos componentes: el territorial y los cuerpos de combatientes. (…) Esta semana voy a activar un plan especial para garantizar la cobertura’, declaró Maduro, quien además propuso hacer de Venezuela un país ‘inexpugnable’.
Además, detalló que las milicias están ‘preparadas, activadas y armadas’. ‘Seguiré avanzando en el plan de activación de las milicias campesinas y de las milicias obreras, en todas las fábricas y centros de trabajo de todo el país’, destacó. ‘Ningún imperio va a tocar la tierra sagrada de Venezuela’, afirmó.
Esta declaración surge poco después de que el Gobierno de Estados Unidos aumentara a 50 millones de dólares (casi 43 millones de euros) la recompensa por información que contribuya al arresto del presidente venezolano, un incremento desde los 25 millones de dólares (algo más de 21 millones de euros) anunciados inicialmente este año.
Desde Washington, la justificación de esta medida se apoya en que ‘hasta la fecha, la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) ha incautado 30 toneladas de cocaína vinculadas a Maduro y sus socios y casi siete toneladas vinculadas al propio’ dirigente venezolano, mientras que su cartera ‘ha incautado más de 700 millones de dólares (casi 600 millones de euros) en activos vinculados a Maduro, incluidos dos jets privados, nueve vehículos y mucho más’.