Mahmoud Khalil, activista en favor de Palestina, fue arrestado a inicios de marzo y liberado varios meses después en el contexto de la represión de EE.UU. a las protestas por la acción militar de Israel en Gaza. Este jueves, ha interpuesto una demanda solicitando 20 millones de dólares (aproximadamente 17 millones de euros) en compensación por daños y perjuicios contra la gestión de Donald Trump.
«Solicitamos 20 millones de dólares en daños y perjuicios contra la Administración Trump debido al arresto inconstitucional e ilegal y todas estas condiciones a las que me sometieron. Este es solo el primer paso hacia la rendición de cuentas, que esta Administración tiene que pagar por lo que está haciendo contra mí o contra cualquiera que se oponga a su agenda fascista», declaró Khalil a NBC News.
Khalil, egresado de la Universidad de Columbia y quien estuvo detenido más de tres meses en Luisiana bajo acusaciones de respaldar a Hamás, ha propuesto una alternativa a la compensación monetaria. «O los 20 millones de dólares o una disculpa oficial de la Administración, porque, en última instancia, mi objetivo no es enriquecerme. No quiero este dinero solo porque lo necesite. Lo que quiero es una verdadera rendición de cuentas. Una verdadera rendición de cuentas por las injusticias que se cometieron contra mí con los procesos maliciosos que se me imputaron por todo esto», aseguró.
En caso de obtener la compensación, Khalil ha comentado que pretende compartirla con otros afectados por los esfuerzos «fallidos» del presidente estadounidense para suprimir la voz propalestina. La acción legal, fundamentada en la Ley Federal de Reclamaciones por Agravio, involucra a los departamentos de Seguridad Nacional y de Estado, así como al ICE.
A pesar de que sigue enfrentando un proceso de deportación, Khalil ha criticado fuertemente la persecución en su contra «por mi discurso, por quién soy, y no por ningún delito que haya cometido. No he cometido ningún delito», subrayó, antes de condenar las «políticas draconianas y autoritarias» de la Administración Trump que no le impedirán «alzar la voz contra el genocidio que está ocurriendo en Palestina en este momento». Por otro lado, desde la Casa Blanca, las acusaciones de Khalil han sido tildadas de «absurdas» y Tricia McLaughlin, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, ha criticado al joven por su «comportamiento y retórica odiosos» hacia los estudiantes judíos.
















