En un reciente encuentro en Beirut con Morgan Ortagus, enviada adjunta de Estados Unidos para Oriente Próximo, el presidente libanés Joseph Aoun ha reclamado esfuerzos para detener los ataques de Israel contra Líbano. A medida que se incrementan las acciones militares israelíes, Aoun ha subrayado la importancia de “activar y trabajar” para poner fin a las infracciones israelíes, a pesar del cese al fuego establecido en noviembre de 2024, según informa un comunicado oficial.
Aoun ha lamentado la pérdida de 23 vidas libanesas en octubre debido a estos conflictos y ha urgido a fortalecer las labores de la comisión encargada de supervisar el alto el fuego, en la que participan Estados Unidos y Francia. También ha destacado la urgencia de que los afectados puedan volver y reparar sus hogares dañados, sobre todo con la llegada del invierno.
Recientemente, los ataques han dañado infraestructura esencial para la reconstrucción en el sur de Líbano, generando preocupaciones de que estos actos busquen impedir la recuperación de la región. Ortagus, tras su visita a Israel y un recorrido por la frontera norte, asistirá a una reunión de la comisión supervisora esta semana.
Según fuentes de la ONU, desde la implementación de la tregua han fallecido 111 civiles por acciones del ejército israelí. A pesar del alto el fuego, Israel ha continuado con numerosos bombardeos, justificándolos como acciones contra Hezbolá, y mantiene vigilancia aérea sobre Líbano. El acuerdo de cese al fuego exigía la retirada de ambos bandos del sur de Líbano, pero Israel ha conservado cinco bases militares en la zona, lo cual ha sido objeto de críticas tanto de Beirut como de Hezbolá.
















