Varias centenas de manifestantes se congregaron este lunes en Israel frente a la sede del primer ministro, Benjamin Netanyahu, en protesta por el inminente voto de cese de la fiscal general del país, Gali Baharav Miara. Este voto se produce tras una audiencia en la que ella tuvo oportunidad de defender su labor.
Los participantes en la protesta declaran que la coalición de Gobierno intenta despedir a la fiscal a cualquier precio y sostienen que Netanyahu pretende su destitución ya que ella ha desafiado repetidamente al primer ministro y a sus socios políticos.
Con banderas de Israel y pancartas, los manifestantes también expresaron su deseo de cesar las hostilidades en Gaza para facilitar la liberación de rehenes.
Críticas desde la oposición
Yair Golan, líder de Los Demócratas, criticó duramente a Netanyahu, lamentando que el gabinete se concentre en despedir a la fiscal «cuando los rehenes están muriendo en los túneles, mientras la sociedad israelí se resquebraja». Golan argumentó que el Gobierno no se está ocupando de gestionar la liberación de los rehenes, ni de terminar la guerra, ni de la seguridad nacional.
«El Gobierno israelí, en estos tiempos tan difíciles, está únicamente ocupado con sus asuntos», enfatizó. A su vez, los manifestantes calificaron a la coalición gobernante de «criminal».