Este viernes, una gran multitud de ciudadanos sirios ha tomado las calles en diversas regiones del país con motivo del aniversario de la sorpresiva ofensiva liderada por Hayat Tahrir al Sham (HTS) y otros grupos rebeldes, la cual resultó en la destitución del expresidente Bashar al Assad a comienzos de diciembre de 2024.
En ciudades como Idlib y Damasco, se han visto manifestaciones a favor del régimen, donde incluso se reportó la quema de banderas israelíes como protesta ante un reciente ataque del Ejército de Israel en Beit Yin, tal como informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Desde Londres, este observatorio ha reportado presiones sobre la comunidad alauí en Latakia, Tartus, Homs y Hama para que respalden al nuevo gobierno transitorio. Tras la caída de Al Assad, iniciada el 27 de noviembre de 2024, el nuevo liderazgo enfrenta retos de seguridad y tensiones sectarias, a pesar de las garantías de Ahmed Al Shara, líder de HTS y anteriormente conocido como ‘Abú Mohamed al Golani’, de procurar una estabilización.
