La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha expresado su firme rechazo a la acción de la Global Sumud Flotilla, que actualmente se dirige hacia la Franja de Gaza con cargamentos de ayuda, describiéndola como “innecesaria, peligrosa e irresponsable”.
“No hay necesidad de arriesgar la seguridad. No hay necesidad de entrar en una zona de guerra para entregar una ayuda a Gaza que el Gobierno italiano y las autoridades competentes podrían haber entregado en cuestión de horas”, declaró Meloni desde Nueva York.
Además, enfatizó que tales iniciativas “parecen estar diseñadas no para entregar ayuda, sino para crear problemas al Gobierno”. Aunque condenó los ataques a los barcos de la flotilla, anunció que se han puesto en marcha investigaciones para esclarecer estos sucesos.
Meloni también comunicó que el ministro de Exteriores, Antonio Tajani, está elaborando un plan para que la ayuda sea enviada primero a Chipre y luego transferida al Patriarcado Latino de Jerusalén, esperando una respuesta de la flotilla al respecto.
“Espero una respuesta muy clara de los líderes de los partidos de la oposición que tienen a sus parlamentarios a bordo de estos barcos, porque quiero respuestas serias; de lo contrario, estamos jugando a un juego. El problema es que no estamos jugando a la petanca, estamos hablando de una guerra”, subrayó.
La jefa del gobierno italiano añadió que Roma ha autorizado la movilización de una fragata a la zona, una medida divulgada por el ministro de Defensa, Guido Crosetto, “para garantizar, de ser necesario, el rescate y la asistencia de aquellos que se encuentren en peligro”, aunque aclaró que “no se prevé el uso de la fuerza militar”.
Esta reacción ocurre tras los ataques que sufrió la Global Sumud Flotilla, que incluyeron el uso de drones y explosiones dirigidas a sus barcos mientras estaban en Túnez, y después de solicitar “escolta marítima y observadores diplomáticos” a las naciones de la ONU debido a la “escalada alarmantemente peligrosa” denunciada.











