En la conmemoración del 35 aniversario de la reunificación alemana, Friedrich Merz, canciller de Alemania, ha solicitado un «nuevo comienzo» para el país, históricamente dividido entre la República Federal de Alemania (RFA) y la República Democrática Alemana (RDA) desde 1949.
Durante una ceremonia en Sarrebruck, cerca de la frontera francesa, el líder de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) expresó: «Tras 35 años de unidad alemana y en un momento difícil para nuestro país, debemos reorganizarnos y mirar hacia el futuro con confianza y energía». Además, enfatizó la importancia de un esfuerzo colectivo para lograr una nueva unidad nacional, instando a los ciudadanos a «confiar en los cambios» y «no dejarse paralizar por los miedos».
«Atrevámonos a emprender un nuevo comienzo», declaró Merz, quien también rememoró el valor de los alemanes del Este al reiniciar sus vidas hace más de tres décadas. Destacó un «espíritu positivo» capaz de «liberar» y criticó el pesimismo por su capacidad de «desperdiciar energía».
Merz subrayó que Alemania está ante un «momento decisivo» y una «fase importante para la historia reciente» del país, señalando la necesidad de «introducir reformas» y la importancia de comprender la magnitud de estos cambios para todos los alemanes. Reiteró el compromiso del país con la democracia, la constitución, la fortaleza económica y social, y su rol en Europa.
En cuanto a la defensa, Merz apuntó a la necesidad de expandirla y asumir «más responsabilidades», haciendo un llamado para que la ciudadanía participe en el servicio militar voluntario y para «recuperar la fortaleza económica con la tecnología más moderna».