El mandatario argentino, Javier Milei, ha lanzado acusaciones el martes contra un grupo de periodistas por integrar una red de espionaje ilegal después de que se revelara un nuevo audio de su hermana Karina en relación con un presunto caso de corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis).
Estos espías que se disfrazan de ‘periodistas’ quieren desviar la atención del tema real. No están por encima de la ley. Se creen impunes y no lo son, enfatizó Milei en una declaración en redes sociales, sin mencionar a los presuntos implicados.
Estas declaraciones ocurren tras la divulgación de un audio en el canal uruguayo de streaming Dopamina, supuestamente grabado en el Congreso, mencionando al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, quien ha indicado que estas acciones son un un intento deliberado de desestabilización antes de las elecciones.
El tren fantasma no soporta que un gobierno elegido por mandato popular avance contra sus privilegios, y por eso recurre a operaciones de Inteligencia ilegal y campañas de difamación, declaró Menem en redes sociales, agregando que el audio fue grabado de manera ilegal en la Cámara de Diputados.
La ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, comunicó que el Gobierno ampliará la denuncia luego de que un juez federal argentino ordenara recientemente la prohibición de difundir las grabaciones relacionadas con Karina Milei en la Casa del Gobierno.
Entre los señalados por el Gobierno por la difusión de los audios están el periodista Mauro Federico, el empresario Pablo Toviggino, el presentador Jorge Rial y el abogado Franco Bindi, descripto como un operador judicial vinculado al exdirector de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) Fernando Pocino.
En un audio divulgado por Carnaval Stream, Karina Milei hizo un llamado a la unidad de cara a las elecciones internas del partido gobernante, La Libertad Avanza. Este es el mismo medio que expuso las grabaciones que mostraron sobornos en la Agencia Nacional de Discapacidad a través de Suizo Argentina, llevando a la destitución de su director ejecutivo, Diego Spagnuolo.
El contenido de estos audios, negado rotundamente por la Casa Rosada, sugiere que los sobornos eran para Karina Milei y su confidente, Eduardo Lule Menem. Actualmente, hay dos denuncias en el contexto de esta trama de audios: una civil, que restringe la difusión de las grabaciones, y otra penal a cargo del juez Julián Ercolini.
El Ministerio de Seguridad Nacional ha solicitado en su denuncia el registro de los domicilios de los periodistas mencionados, del abogado Franco Bindi, pareja de la diputada Marcela Pagano –presunta responsable de la difusión de audios–, así como de la oficina de Carnaval Stream.
En respuesta, el abogado Gregorio Dalbón, representante de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, ha interpuesto una denuncia contra el Gobierno por un presunto delito de abuso de autoridad tras haber solicitado los registros.
