El monarca marroquí, Mohamed VI, ha proclamado este viernes la apertura de un ‘nuevo y victorioso capítulo’ para Marruecos en relación con el Sáhara Occidental, tras el apoyo del Consejo de Seguridad de la ONU al plan de autonomía propuesto por Marruecos para esta antigua colonia española.
‘Tras 50 años de sacrificios, abrimos un nuevo y victorioso capítulo en el proceso de consagración de la identidad marroquí del Sáhara, con el objetivo de poner fin definitivamente a este conflicto artificial, mediante una solución consensuada basada en la Iniciativa de Autonomía’, declaró Mohamed VI en un discurso a la nación.
El rey destacó el ‘orgullo’ de que este cambio histórico coincida con el 50 aniversario de la Marcha Verde, y resaltó el ampliado reconocimiento de la soberanía económica del reino sobre ‘sus provincias del sur’ tras la decisión de la Unión Europea y varios países, incluido España o Estados Unidos, de ‘fomentar la inversión’ en ellas.
‘Estamos viviendo un momento crucial y un punto de inflexión decisivo en la historia moderna de Marruecos: a partir de ahora habrá un antes y un después del 31 de octubre de 2025. Ha llegado el momento de un Marruecos unido que se extienda desde Tánger hasta La Agüera’, afirmó el monarca.
Además, el rey aseguró que Marruecos está ‘entrando en una fase decisiva’, ya que la resolución de la ONU ‘define los principios y fundamentos que probablemente conduzcan a una solución política definitiva de este conflicto’. Según el documento, se comprometió a ‘actualizar y perfeccionar’ su propuesta.
‘Si bien la cuestión de nuestra integridad territorial ha experimentado avances positivos, Marruecos mantiene su compromiso de alcanzar una solución que preserve la dignidad de todas las partes, sin vencedores ni vencidos. Marruecos no ostenta estos cambios como un trofeo y no desea en absoluto avivar antagonismos ni exacerbar divisiones’, dijo Mohamed VI.
En este contexto, hizo un llamamiento a las personas en los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf (Argelia) para que aprovechen ‘esta oportunidad histórica para reunirse con sus familias y beneficiarse’ del plan marroquí, ‘que les permite contribuir’ al ‘desarrollo de su patria y a la construcción de su futuro en un Marruecos unido’.
‘En mi calidad de rey, garante de los derechos y libertades de los ciudadanos, afirmo solemnemente que todos los marroquíes son iguales y que no existe diferencia alguna entre quienes han regresado de los campamentos de Tinduf y sus hermanos y hermanas que residen en el resto del territorio nacional’, aseguró.
Finalmente, invitó al presidente argelino, Abdelmayid Tebune, a ‘un diálogo sincero y fraterno entre Marruecos y Argelia’, con el objetivo de ‘superar’ sus diferencias y ‘sentar las bases de nuevas relaciones basadas en la confianza, la fraternidad y la buena vecindad’. También hizo una ‘mención especial’ a Estados Unidos bajo el liderazgo de su ‘amigo’ Donald Trump, y agradeció a España, Reino Unido y, especialmente, a Francia, ‘cuyos esfuerzos contribuyeron al éxito de este proceso pacífico’. Además, extendió su ‘sincero agradecimiento’ a todos los países árabes y africanos que han mostrado ‘consistentemente su apoyo incondicional a la identidad marroquí del Sáhara, así como a los diversos países del mundo que apoyan’ su iniciativa.
