La MONUSCO, la misión de paz de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo, ha anunciado su total disposición para asistir en todas las fases necesarias del proceso de paz entre el Gobierno congoleño y las milicias del M23, tras la firma de una declaración de principios realizada recientemente en Doha, la capital de Qatar.
Esta declaración incluye inicialmente un alto al fuego y designa a la MONUSCO como garante de futuras acciones para el regreso de los numerosos desplazados que escaparon de los enfrentamientos en el este del país y para verificar oficialmente la finalización de las hostilidades.
Recordemos que la misión ha recibido varias críticas por parte de la sociedad civil del Congo, que la ha acusado de tener una actitud demasiado pasiva en la protección de los civiles, y ha enfrentado protestas durante el 2022 que resultaron en más de treinta fallecidos.
En un comunicado emitido el sábado por la noche, Bruno Lemarquis, jefe interino de la fuerza de paz, expresó en nombre de la misión ‘su disposición a apoyar el cese de las hostilidades, en particular mediante el establecimiento de un mecanismo de verificación creíble y acordado de manera conjunta’.
‘La MONUSCO celebra el compromiso de ambas partes de facilitar el retorno voluntario, seguro y digno de las personas desplazadas internamente y refugiadas a sus lugares o países de origen’, agregó Lemarquis, quien también es el representante especial adjunto del secretario general de la ONU en el país, alabando una declaración que ‘refleja la determinación de las partes de priorizar los medios pacíficos’ para solucionar uno de los conflictos más cruentos de África en tiempos recientes.
Finalmente, la MONUSCO ‘insta a todas las partes a cumplir sus compromisos, actuar de buena fe durante todo el proceso y priorizar los derechos humanos, la seguridad y las aspiraciones del pueblo congoleño en todas las decisiones’.