Médicos Sin Fronteras (MSF) ha expresado su descontento este lunes al informar que 36 de sus trabajadores palestinos de un centro médico en Deir al Balá, al norte de la Franja de Gaza, han sido desplazados debido a una orden de evacuación dictada por el Ejército israelí la jornada anterior.
Estas órdenes afectaron a nuestro personal residente en Deir Al Balá. 36 colegas palestinos de nuestra clínica de Mawasi tuvieron que abandonar abruptamente un concurrido centro de salud que estaba atendiendo a una afluencia de pacientes de los lugares de distribución de la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF, por sus siglas en inglés) para evacuar a sus familias, ha manifestado la organización a través de un comunicado en la red social X, haciendo hincapié en que Deir al Balá era considerada hasta entonces como el último lugar relativamente seguro en Gaza y ahora se incluye en más del 87 por ciento como zona militar restringida.
Además, MSF ha señalado que esta orden de desplazamiento forzado ha perjudicado a una comunidad que varía entre 50.000 y 80.000 personas, de acuerdo con datos de Naciones Unidas, afectando gravemente una de las principales arterias de suministro de agua en el sur de Gaza.
Hoy (por este lunes) los camiones de distribución de agua no podían llegar a la planta, y estas órdenes pondrán en peligro a cualquiera que intente distribuir agua desde aquí en un futuro próximo. Las plantas de agua y los sistemas de distribución son un salvavidas esencial para la población de Gaza y deben ser protegidos, argumentó la ONG.