El Ejército de Chad ha informado de la muerte de dos de sus soldados y de que un tercero ha resultado herido tras el ataque de un dron contra un campamento militar situado en la zona limítrofe con Sudán.
Aunque no precisa quién es el responsable directo, el mando chadiano apunta a las “partes beligerantes” sudanesas, es decir, el Ejército regular y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF). En líneas generales, el Estado Mayor ha calificado lo ocurrido como una incursión armada y ha anunciado que habrá respuesta.
Según el comunicado castrense, el ataque se produjo el pasado jueves 25 alrededor de las 02.00, cuando “un dron atacó un campamento militar en el área de Tiné, provincia de Uadi Fira que resultó en dos muertos y un herido”.
La localidad de Tiné se ubica justo en la línea fronteriza entre Chad y la región occidental sudanesa de Darfur Norte, muy próxima a la población de Karnoi, escenario horas antes de enfrentamientos entre el Ejército sudanés y las fuerzas paramilitares.
El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, el general Abakar Abdelkerim Daoud, ha denunciado “esta incursión en el territorio nacional y condena en los términos más enérgicos posibles esta agresión injustificada contra la posición del Ejército Nacional y la integridad territorial de Chad”.
El general Daoud “considera este acto de hostilidad, reprensible según el derecho internacional, como un ataque intencional y manifiestamente deliberado y advierte a los beligerantes en el conflicto sudanés”, a quienes reclama “a respetar estrictamente la soberanía de Chad”.
“Las Fuerzas Armadas Nacionales de Chad se reservan el derecho de responder con firmeza y vigor, en legítima defensa, a cualquier nueva violación del territorio nacional, utilizando todos los medios legales y de conformidad con el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas”, concluye la nota oficial, firmada por el portavoz del Ejército chadiano, el general Issakha Acheikh Chanane.