En una respuesta coordinada al ataque aéreo llevado a cabo por Israel contra una representación de Hamás en Doha, que resultó en la muerte de cinco integrantes del grupo palestino y un oficial de seguridad de Qatar, los países del Consejo de Cooperación de Estados Árabes del Golfo (CCG) han activado medidas defensivas conjuntas. Esta decisión fue tomada el jueves pasado durante una reunión urgente del Consejo Conjunto de Defensa del CCG en la capital qatarí.
El comunicado emitido tras la reunión destaca que se han adoptado «las medidas ejecutivas necesarias para activar los mecanismos de defensa conjunta y las capacidades de disuasión del Golfo». Estas incluyen un aumento en el intercambio de inteligencia a través del Mando Militar Unificado y la actualización de los sistemas de alerta temprana sobre misiles balísticos.
Los miembros del CCG, que incluyen a Arabia Saudí, Bahrein, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Omán y Qatar, han acordado también actualizar sus planes de defensa y realizar maniobras conjuntas en los próximos meses. Se ha calificado el bombardeo israelí de «flagrante violación de la soberanía y la integridad territorial de Qatar» y una «amenaza a su seguridad y estabilidad», recalcan que «este acto agresivo representa una escalada peligrosa e inaceptable y una violación grave de los principios del Derecho Internacional y la Carta de Naciones Unidas».
Además, han subrayado que cualquier ataque contra Qatar es un ataque contra todos los Estados del CCG, representando una amenaza directa a la seguridad de toda la región y un desafío a los esfuerzos diplomáticos de mediación realizados por Qatar, incluyendo las negociaciones para un alto el fuego en la Franja de Gaza y la liberación de rehenes y detenidos.
El incidente del 9 de septiembre, que coincidió con una reunión de Hamás para discutir una propuesta de alto el fuego propuesta por Donald Trump, fue denunciado como «terrorismo de Estado» por el primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulrahmán al Thani. Curiosamente, a pesar de las advertencias de Estados Unidos sobre el ataque, las autoridades de Qatar negaron haber recibido tal aviso a tiempo, lo que fue posteriormente confirmado por Trump al señalar que el mensaje del enviado especial llegó demasiado tarde.