El aspirante a la Presidencia de Honduras, Salvador Nasralla, ha reiterado este domingo que ha sido víctima de un amplio robo de votos en los comicios celebrados la semana pasada en el país, en un contexto marcado por la suspensión del recuento oficial y las críticas de observadores internacionales al desarrollo del escrutinio.
“Después de analizar miles de actas, comprobamos que en la mayoría de los departamentos fuimos robados en la transcripción de las actas, incluso en Lempira, Intibuca y La Paz”, ha denunciado el candidato conservador, que figura actualmente en segundo lugar en el recuento provisional, a unos 20.000 votos de diferencia respecto a su contrincante, el ultraderechista Nasry Asfura.
“Todo sigue igual desde la madrugada del jueves 4 en el cómputo. Están siendo irresponsables con el país, manteniendo en zozobra a la población”, ha lamentado Nasralla, aludiendo a la falta de avances en el conteo oficial.
El Partido Libertad y Refundación (LIBRE), liderado por la oficialista Rixi Moncada, que partía como tercera fuerza en las encuestas, ha reclamado directamente que se anule el escrutinio de las elecciones del pasado 30 de noviembre, denunciando un “desastre” en el recuento tras siete días sin que se proclame un ganador.
Con el 88,02 por ciento de las actas contabilizadas, Asfura, del Partido Nacional, continúa al frente del recuento con 1.132.321 votos (40,19 %), mientras que Nasralla, del también conservador Partido Liberal, alcanza 1.112.570 sufragios (39,49 por ciento), de acuerdo con los datos oficiales provisionales difundidos por el Consejo Nacional Electoral, en un proceso marcado por interrupciones constantes en el conteo.
El escrutinio del CNE permanece detenido desde el viernes y no se actualiza desde hace más de 18 horas. La candidata presidencial Moncada se mantiene en tercera posición, con 543.675 papeletas (19,30 %).