El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha intentado separar a su administración de las polémicas palabras del ministro de Patrimonio de Israel, Amichai Eliyahu, quien aseguró que, ‘gracias a dios’, Israel está ‘avanzando a toda velocidad para arrasar Gaza’, afirmando que ‘no habla por mi Gobierno’.
‘El ministro Amichay Eliyahu no habla por el Gobierno que dirijo. No es miembro del Gabinete de Seguridad que determina la conducta de la guerra’, explicó Netanyahu mediante un comunicado difundido por su Oficina en la plataforma X.
Netanyahu también enfatizó en que ‘sus opiniones son personales. Se opuso al acuerdo de liberación de rehenes y decidió dimitir (del Gabinete)’. ‘La política de este Gobierno es clara y unida’, recalcó, haciendo hincapié en que ‘sus declaraciones no la representan’.
Previamente, en una entrevista radial israelí, Eliyahu manifestó, en relación a los habitantes de Gaza, que estaban ‘erradicando este mal’. ‘Estamos expulsando a esta población que ha sido estudiada en el ‘Mein Kampf», comentó, refiriéndose a ‘Mi Lucha’, la obra de Adolf Hitler.
Además, proclamó que ‘toda Gaza será judía’, y rebatió que los gazatíes carecen de suficiente apoyo humanitario. ‘No hay hambre en Gaza’, sostuvo el ministro, quien además calificó a los residentes del territorio palestino como ‘monstruos’, comentarios que Yair Lapid, líder de la oposición, tachó de ‘un desastre propagandístico’.











